“La alegría del Evangelio llena el corazón y la vida entera de los que se encuentran con Jesús” Papa Francisco
Quito, 22 de Octubre de 2014.
AÑO DE LA VIDA CONSAGRADA
A toda la Vida Consagrada de Ecuador: Religiosos/as, Vida Monástica, Institutos, Sociedades de Vida Apostólica, Vírgenes Consagradas.
El Papa Francisco invita a celebrar el Año de la Vida Consagrada. La invitación fue presentada oficialmente el 31 de enero de 2014 por el Cardenal João Braz de Aviz, Prefecto de la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica y el Arzobispo José Rodríguez Carballo, O.F.M., Secretario del mismo dicasterio.
El año de la Vida Consagrada está relacionado con los cincuenta años del Concilio Vaticano II, especialmente del documento “Perfectae Caritatis”, sobre la renovación de la vida consagrada. El cardenal Braz, presenta los objetivos del Año de la vida Consagrada:
- “Queremos que este año sea una ocasión para recordar “con memoria grata” este pasado reciente, queremos reconocer y confesar nuestra debilidad, queremos también 'gritar' al mundo con fuerza y alegría la santidad y la vitalidad que están presentes en la Vida Consagrada.
- Con la mirada positiva sobre este tiempo de gracia que va del Concilio a hoy, queremos y este es el segundo objetivo 'abrazar al futuro con esperanza'. Somos muy conscientes de que el momento actual es 'delicado y fatigoso' y que la crisis que atraviesa la sociedad y la misma Iglesia toca plenamente a la vida consagrada.
- Esta esperanza no nos ahorra, y de esto son muy conscientes los consagrados, 'vivir el presente con pasión', y este es el tercer objetivo del Año” el cual “será un momento importante para 'evangelizar' la vocación propia y dar testimonio de la belleza de la 'sequela Christi' en las múltiples formas en que se desarrolla nuestra vida”.
El año de la Vida Consagrada se abrirá el 30 de noviembre 2014 (I Domingo de Adviento) y se clausurará el 2 de Febrero 2016.
La Vida Consagrada del Ecuador acoge este llamado como un tiempo de gracia, como una ocasión privilegiada para profundizar en nuestra vocación, para renovar profundamente la llamada y la respuesta a nivel personal y desde el corazón de nuestras Congregaciones, nos invita a abrir el corazón para que dejemos entrar la gracia de la transformación, que permita a la Vida Consagrada, tomar nuevos impulsos en la misión, a partir del discernimiento, acogiendo las llamadas del Espíritu y apoyada en el enraizamiento en Jesucristo, que le permitirá tener la vitalidad evangélica, que nos sugiere el Papa Francisco, hoy.
Realmente es una oportunidad, como nos dicen los objetivos de este año, para “agradecer”, por cada consagrado/a, por sus familias, por sus pueblos, porque han sembrado con su vida la alegría del Evangelio; ocasión para reconocer y pedir perdón por una Vida Consagrada que le ha faltado fortaleza, profecía y esperanza; es un tiempo de Dios, para valorar la belleza del seguimiento a Jesucristo, renacer en la alegría y “vivir el presente con pasión”, fortaleciendo las bases, convicciones y raíces profundas para la Vida Consagrada del presente y del futuro.
El Equipo de Reflexión Teológica de la CER ha preparado cinco módulos, a partir de la Evangelli Gaudium, que están disponibles en forma impresa y digital en página “Vida de la CER”; estos materiales ayudarán a profundizar y prepararnos, tanto para la celebración de la Semana Teológica, como para el Año de la Vida Consagrada.
Queridos hermanos/as, encomendemos al Señor y a nuestra Madre Santísima la preparación, la celebración y los compromisos concretos de nuestra Vida Consagrada en este año de especial importancia para nuestra vocación y misión.
Que todo lo hagamos para la mayor gloria de Dios.
JUNTA DIRECTIVA NACIONAL DE LA CER